mayo 13, 2009

Entre dichos y desdichos


Vayan ustedes a saber si es cierto lo primero o lo segundo. Lo que es cierto es que generó toda una polémica al respecto. No porque fuera algo desconocido, sino porque se refrendaron las ideas que comparten muchos mexicanos en torno al tan supuesto enriquecimiento ilícito de la familia Salinas, cuando Carlos fue presidente de nuestro país. Miguel de la Madrid no fue necesariamente un brillante líder político, pero si tuvo el cuidado y el recato de dejar el poder sin escándalos de tipo personal, si bien no logró dejar buena imagen de su gestión. De muchas formas, puede considerarse alguien con autoridad moral para hacer los comentarios sobre su "decepción" con Salinas, en cuanto a hacerlo su sucesor y en cuanto lo que éste hizo en lo particular durante su gobierno. Triste.

Pero más triste resulta que se desdijera de lo dicho. Aquí una declaración que pienso quedará para la posteridad:
Debido a que "me encuentro convaleciendo de un estado de salud que no me permite procesar adecuadamente diálogos, mis respuestas --en la entrevista que dio a conocer Carmen Aristegui-- carecen de validez", apuntó el ex presidente Miguel de la Madrid.

Ok...

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